martes, 30 de septiembre de 2008
Poema iv
El muchacho en la ventana,
dirigióse, él, a la eternidad.
Quizás ella se arrepintió,
martes, 9 de septiembre de 2008
Intridicción a "Poemas al amor no recíproco"
Y dios abrió la boca:
“Los ricos serán ricos
Y los pobres, explotados.”
Y Dios cerró la boca:
“Los pobres son humildes.
(Porque no cuestionan el poder,
Son brutos, sin educación,
Ni salud, ni alimentación.
Los ricos no deben darles
Privilegios algunos, porque
Su puesto se vería en peligro.
Mejor es callarlos con
Algún bono o regalo
Y se mantendrán callados.
Yo digo: ricos, no distribuyan
Sus bienes que sus antepasados
Les robaron a los demás
Para dar como herencia a vosotros.
Ustedes dirán como discurso:
Pueblo, vean el presente y
Olviden el tormentoso pasado
Por un beneficioso futuro.
Obviamente, ricos, repetirán
Lo que en el pasado hicieron.
Y los pobres seguirán siendo pobres
Sin darse cuenta, lo peor de todo.)
Y por ser humildes es que los amo.
(Su humildad no los deja pensar,
No los deja cuestionar el poder.
Eso no es más beneficioso, sino
A aquellos que mandan y ordenan,
Por ejemplo, reyes, jefes y presidentes.
Y le conviene a quien más poder
Sobres las demás bestias tenga:
Lo obvio de lo cierto: a mí.)
Y en consecuencia, no los abandonaré.
(Con esta afirmación
Que en verdad es mentira,
Ellos celebrarán una fiesta eterna
Con eternos obsequios hacia mí,
Que en verdad es mentira,
Porque son para ustedes, todo.
Mientras más lo repitan,
Su convencimiento crecerña
Hasta no más, sino explotar.
Los harán trabajar en extremo
Y lo que ellos obtengan,
Se los pedirán como ofrenda
Hacía mí, su Dios Todopoderoso
Que en verdad es mentira,
Porque son para ustedes, todo.
Y ellos, endeudados, trabajarán más
Para ofrecer más hacía mí
Que en verdad es mentira,
Porque son para ustedes, todo
Y así poder salvarse e ir al cielo,
El cual sabemos no existe.
Y ustedes serán mis predicadores.)
Y jamás los abandonaré.
(Si es lo primero que voy a hacer:
Si van a la guerra,
Que se mueran los pobres.
Los harán soldados,
Morirán todos, pero ustedes no.
Dirán como justificación mía:
Que los amo a todos, y observo,
Pero no participaré en nada,
Que yo, todo lo permito.
Como a nadie ellos cuestionan,
No verán que ya los abandoné.)
Y no olviden que los amo.”
(Ay, las cosas que uno
Tiene, obligado, que decir,
Para que otros idiotas a uno
Sin preguntar le crean.)
Y Dios cerró la boca,
Y se cruzó de brazos.